Eso es lo que Jesús pidió a sus discípulos, y lo que nos sigue pidiendo hoy a todos y cada uno de nosotros. Testimoniar con nuestra forma de ser y vivir, con nuestras acciones diarias, con nuestros gestos y con nuestras palabras…
Y, como dice nuestro lema del curso, siendo capaces de estar al lado de aquellos que más nos necesitan, de aquellos que nos piden ayuda… porque además de testimonios, hacen falta manos generosas, dispuesta a desprenderse de parte de lo que tienen para compartirlo con los demás.
Por ello, GRACIAS a todos por haber hecho posible que, desde nuestro colegio, hayamos podido enviar 1097´39 € a todos aquellos que quizás no son tan afortunados como nosotros.